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La primavera arrancará con el décimo temporal en un año que ha batido récords

Enero y febrero ha sido el periodo con una media de olas más alta desde 1959

Margarita Martín, junto a subdelegado del Gobierno en Gipuzkoa, José Luis Herrador, este jueves en San Sebastián.
Margarita Martín, junto a subdelegado del Gobierno en Gipuzkoa, José Luis Herrador, este jueves en San Sebastián.JAVIER HERNÁNDEZ

La primavera que meteorológicamente arranca hoy se estrenará en el País Vasco con una vuelta al invierno desde mañana, ya que volverán las lluvias y llegará el décimo temporal de olas, aunque más suave que los nueve que le han precedido este invierno que ha batido todos los récords en cuestión de oleaje.

La predicción ha sido formulada este jueves por la delegada territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en el País Vasco, Margarita Martín, quien ha explicado que este invierno se ha caracterizado por una conjunción de precipitaciones, vientos, oleaje y temperaturas por encima de lo normal y una presión atmosférica inferior que constituyen un fenómeno que se repite en ciclos de alrededor de 30 años.

La nota diferenciadora de los meses de enero y febrero en Euskadi "no ha sido de máxima altura de ola", ya que la más elevada de esta temporada midió 11 metros y se registró el 28 de enero a las 14.30, cuando en 1996 esta cota ascendió hasta los 13,70 metros. Este cómputo está basado en las mediciones realizadas con boyas, una fórmula que se lleva a cabo desde los años noventa, pero, si se atiende a los cálculos realizados a partir de la intensidad del viento, la ola más elevada se registró el 13 de marzo de 1976, con 16,6 metros de altura.

Sin embargo, la temporada sí ha batido récords en la frecuencia de los temporales, ya que con el previsto para el fin de semana, aunque no se esperan alturas de ola superiores a los cinco metros y, por tanto, la alerta no llegaría a naranja, se alcanzaría la decena de estos episodios "cuando lo normal es entre tres y cinco", ha indicado la representante de Aemet. Así, la altura media de las olas se situó el pasado mes de febrero en 4,26 metros, la segunda más elevada después de la registrada en diciembre de 1959 (4,68 metros), los días 2 y 3 de marzo llegó a los 10,20 metros y varios días superó los nueve metros. "Si se miden estos episodios por meses, enero y febrero ha sido el periodo con una media de olas más alta desde 1959, pero si se toma como referencia el comportamiento por meses seguidos es el más elevado desde que hay registro", ha señalado Martín.

Hay un 40% de probabilidades de que las temperaturas sean esta primavera superiores a la media

La mala mar ha venido acompañada de otras "anomalías" como precipitaciones superiores a lo normal y vientos fuertes. De hecho, en Igeldo se han contabilizado 620 litros por metro cuadrado, cuando la normalidad se sitúa en torno a los 373 litros, en Hondarribia 709 litros (lo habitual es 437) y también ha sido superiores los registros en Loiu y Foronda, aunque la oscilación ha sido menor.

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La media de vientos del oeste se ha situado en los 10 kilómetros por hora y los de componente sur, en 30 kilómetros por hora. Eta presencia del viento sur ha conllevado otra de las anomalías de este invierno: la temperatura media de 10,3º, uno y medio por encima de lo normal.

La meteoróloga, sin embargo, ha incidido en que estas peculiaridades se deben a ciclos que se repiten por la sucesión de borrascas que se generan en el Atlántico cada 30 años por causas que la ciencia desconoce y que sucedieron también en los años cincuenta y en los ochenta. "Hasta 2040 no deberían volver esta frecuencia", ha sostenido Martín.

De cara a la primavera, las predicciones sostienen que su inicio será invernal en el País Vasco, con un fin de semana en el que bajarán las temperaturas y volverán las lluvias intensas durante toda la próxima semana y se volverá a hablar de cota de nieve, aunque rondará los 900 metros.

Para el resto de la temporada, Martín ha reconocido que "es muy difícil hacer pronósticos" porque los modelos meteorológicos no contemplan alturas inferiores a los 300 metros, lo que en el caso de Euskadi deja fuera prácticamente a Gipuzkoa y Bizkaia. Los datos apuntan a que hay un 40% de probabilidades de que las temperaturas sean superiores a la media. No obstante, Martín ha advertido de que podría sucederse la situación de "no primavera" que se produjo en 2013 a causa de las lluvias persistentes, porque estos fenómenos son cíclicos y pueden abarcar varios años.

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