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Los recortes frenan la recuperación ecológica del Besòs y del Llobregat

La falta de recursos encallará "durante años" la gestión medioambiental de los ríos, avisa la UB - La vegetación y la fauna no han llegado a recuperarse

La recuperación ecológica de las últimas décadas en las cuencas del Besòs y del Llobregat quedará frenada, sin alcanzar niveles aceptables, por los recortes aplicados por la Generalitat. Así lo advierte el informe de calidad de los ríos en 2010 elaborado por la Diputación de Barcelona y coordinado por catedráticos de la Universidad de Barcelona.

El estudio detecta una mejoría en los grados de calidad biológica del agua, pero destaca que la vegetación de ribera sigue sin recuperarse y que globalmente "los valores son más bien negativos". En especial en las cuencas del Besòs y el Llobregat, más perjudicadas por la elevada contaminación del área barcelonesa. "Dada la disminución de los recursos económicos para la restauración ambiental, no pueden esperarse cambios sustanciales hacia una mejoría en los próximos años", lamenta el informe al estimar que la Generalitat no destinará recursos económicos a mejorar el grado medioambiental de los ríos. La falta de dotación presupuestaria para la gestión medioambiental coincide con la deuda próxima a los 2.000 millones de euros que arrastra la Agencia Catalana del Agua (ACA), entidad que gestiona las cuencas afectadas.

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La evolución medioambiental de la calidad de las aguas fluviales, sin embargo, mantiene una trayectoria positiva desde 2008, aunque, en gran parte, gracias a la influencia de las lluvias. Los niveles de calidad de 2010 pueden considerarse aceptables en 6 de cada 10 puntos analizados. Los tramos deficientes se han reducido del 21% al 14% en relación con los datos de 2009 y solo el 1% presenta un aspecto pésimo. La mejora está relacionada con la implantación de nuevas estaciones de control y una mejora en la depuración de las aguas residuales. Pero se debe especialmente a la influencia de las precipitaciones en el nivel de caudal de los ríos dado que 2009 y 2010 fueron años especialmente lluviosos.

Los peores datos siguen registrándose en las cercanías del área metropolitana. Las cuencas presentan un cinturón de mala calidad en las inmediaciones de Barcelona. La polución y los residuos se ceban en la cuenca del Llobregat, donde la biodiversidad de las especies autóctonas sigue amenazada. El área natural del delta del Llobregat ha sobrevivido a la desviación del río, a la ampliación del puerto, del aeropuerto de El Prat y a la construcción de la desalinizadora. Pero este y otros informes de entidades ecologistas coinciden en señalar la calidad fluvial de la cuenca entre las peores de Cataluña. Las estaciones de medición registran niveles más positivos en la cuenca del Besòs que aumentan en las cercanías del macizo del Montseny,

Pese a todo, las cuencas siguen requiriendo mejores cifras, avisa el informe. El 40% de los 111 tramos analizados no superaría las exigencias de la UE y 2 de cada 10 mantienen un nivel deficiente.

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