El Gobierno prohíbe el uso de munición de plomo en los humedales

Según el Ministerio de Medio Ambiente esta nueva normativa permitirá resolver los problemas de mortandad de la fauna producida por la intoxicación de los perdigones de plomo, sin restringir la actividad de los aficionados a la caza y al tiro deportivo.

Según el texto del Real Decreto, que entrará en vigor el día 1 de octubre, esta prohibición se aplicará para el ejercicio de la caza y el tiro deportivo cuando estas actividades se ejerzan en zonas húmedas del territorio español que están incluidas en la Lista del Convenio relativo a Humedales de Importancia Internacional, hecho en Ramsar en 1971. También está previsto que se pueda prohibir en otras zonas húmedas que sean objeto de protección conforme a cualquiera de las figuras de espacios naturales protegidos que estén legalmente establecidos.

Las Comunidades Autónomas podrán disponer excepciones temporales siempre que sea por razones imperativas de interés público de primer orden, ya sean de carácter socioeconómico o encaminadas a proteger la salud o la seguridad de los ciudadanos. Estas excepciones solo serán posibles si no existe otra solución satisfactoria y, en ningún caso, se podrá perjudicar el mantenimiento y estado de conservación de las especies que habitan en la zona húmeda.

Este apartado es el que ha desatado las críticas de Ecologistas en Acción que, en un comunicado dado a conocer hoy, lo ha calificado de "incomprensible".

En 1998, explica Ecologistas en Acción, se logró un "importante consenso con los colectivos afectados y se elaboró un proyecto de real decreto por el que prohibía utilizar estos perdigones en las zonas húmedas". "Lamentablemente en los tres últimos años su aprobación ha estado paralizada, a la vez que se ha venido vaciando su contenido", aseguran.

Por último, los ecologistas consideran que la prohibición del uso de perdigones de plomo "se debe ampliar a todo tipo de caza o de tiro deportivo, y que además se deben poner en marcha planes para evitar que los perdigones que actualmente ya están en las zonas húmedas sigan envenenado cada año a decenas de miles de aves acuáticas".

Por su parte, el presidente de la Federación Española de Caza, Andrés Gutiérrez, ha anunciado tras conocer la decisión del Consejo de Ministros que van a presentar "casi con toda seguridad" un recurso, ya que consideran que no se han respetado las conversaciones mantenidas con el Ministerio de Medio Ambiente.

El próximo lunes todos los sectores del mundo de la caza mantendrán una reunión en la que se abordará el nuevo real decreto y se tomarán las medidas oportunas. "No estamos de acuerdo en que se prohiba en todos los humedales, porque primero hay que hacer una concienciación a los cazadores sobre los tipos de cartucho", ha declarado Gutiérrez, que considera un "error" del ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, la posibilidad de extender esta prohibición a todos los humedales españoles, y dejar a las comunidades autónomas la posibilidad de hacerlo o no.

En el Consejo Interautonómico se expuso la prohibición del uso del plomo en municiones para la caza en los humedales incluidos en el llamado Convenio Ramsar, punto en el que todos los sectores del mundo de la caza estuvieron de acuerdo, ha explicado Gutiérrez, que opina que el Gobierno no ha respetado este acuerdo al extender la prohibición a todos los humedales.

España es uno de los 123 países firmantes del Convenio de Ramsar, relativo a Humedales de Importancia Internacional, al que aporta 38 espacios que ocupan una superficie de 158.216 hectáreas. Entre las zonas húmedas españolas que están incluidas en este listado se pueden destacar: los Parques Nacionales de Doñana y Tablas de Daimiel, las Lagunas de Gallocanta y Villafáfila, el Delta del Ebro y la Albufera de Valencia.

"En España no hay ningún cartucho catalogado que no sea de plomo ni por parte del Ministerio ni por nadie", ha asegurado Gutiérrez, que ha destacado el problema que va a provocar el cambio de munición en las armas, ya que los cartuchos de acero no se van a poder utilizar con las armas tradicionales.