Los farmacéuticos catalanes estudian el auge en el consumo de plantas medicinales
La investigación se limita a los productos vendidos en farmacias
Los cuatro colegios de farmacéuticos de Cataluña han iniciado un estudio para analizar el impacto del consumo de plantas medicinales en sus establecimientos. El objetivo de este proyecto es definir el perfil de las personas que adquieren estos principios naturales, así como comprobar si se produce un aumento en el consumo en invierno, coincidiendo con la llegada de la gripe.
El estudio, que se hará público en el congreso Infarma, que se celebrará del 13 al 15 de marzo en Barcelona, analiza la adquisición de plantas medicinales entre los pacientes crónicos y si éstos combinan el consumo de estos extractos con fármacos convencionales para combatir una misma patología. Según la vocal de plantas medicinales del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona, María José Alonso, el objetivo es conocer las posibles interacciones entre estos extractos y los medicamentos.
La investigación también pretende definir el perfil de consumidor de estos productos que, según Alonso, puede variar entre el medio rural y urbano y entre los distintos barrios de una gran ciudad como Barcelona.
En el estudio participan farmacias de toda Cataluña, aunque no herboristerías, establecimientos que tradicionalmente se han dedicado a la venta de estos productos. La investigación sólo analizará, por lo tanto, la dispensación extractos de plantas en farmacias, según ha explicado Alonso.
Los farmacéuticos, que suelen combinar la venta de fármacos con la de plantas medicinales envasadas para hacer infusiones, así como la dispensación de comprimidos naturales, han detectado en los últimos años un auge en la venta de estos últimos productos. "Ahora hay una gran variedad de productos y la gente opta por aquello que le parece más natural", ha apuntado Alonso.
