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Un 85% de los tatuadores no pregunta al cliente si padece alguna alergia, según 'Consumer'

La revista ha realizado un estudio en el que se revela que uno de cada cinco tatuadores no se lava las manos antes de trabajar

La revista Consumer ha realizado un estudio en 105 centros de toda España dedicados al tatuaje y anillado con unos resultados inquietantes. El 85% de los profesionales no pregunta al cliente si padece alguna alergia, enfermedad o problema de cicatrización que desaconseje la intervención y el 55% no informa de las precauciones indispensables que deben tomarse antes de tatuarse como la de no acudir en ayunas y no haber ingerido alcohol o consumido drogas.

El 64% de los profesionales investigados no explica el proceso de colocación de un piercing o de realización de un tatuaje: si es necesaria anestesia o cuánto dura la sesión. Además, tan sólo en el 40% recomienda la aplicación de crema hidratante una semana después de colocarse el tatuaje y durante un mes. En el 75% de los locales no dan consejos sobre cuidados necesarios como no lavarlo con esponjas ni toallas, no arrancar las postillas o costras, no bañarse en piscinas ni en el mar durante el proceso de cicatrización, o la conveniencia de lavarlo con jabón neutro.

Limpieza e higiene son muy mejorables según Consumer. En general, los locales se encontraban en correcto estado de limpieza e higiene tanto en la zona de trabajo como en la de recepción. Sin embargo, se detectaron carencias importantes: el 63% de los establecimientos carecía de una zona de esterilización específica y en el 25% los suelos y paredes de la zona de trabajo no eran de materiales de fácil limpieza y desinfección, como baldosas o azulejos. Además, más de la tercera parte de los tatuadores y perforadores no usan mascarilla, uno de cada seis no se lavan las manos al comienzo y final de la intervención, y en uno de cada cinco casos o no hay camilla, o está mal equipada, o la sábana de papel o tela no está suficientemente limpia.

El 91% de los establecimiento suspende

Los técnicos de Consumer visitaron el pasado febrero 105 establecimientos en Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia, Málaga, A Coruña, San Sebastián, Vitoria, Pamplona, Murcia, Almería, Alicante y Oviedo. El 91% de los establecimientos suspenden el examen de la publicación. La ciudad donde los centros de tatuaje y anillado obtienen una mejor puntuación son A Coruña, donde el 38% de sus centros aprobó globalmente el examen. Le sigue Bilbao, donde aprobó el 25% de los centros y Vitoria. La peor situación se registró en los establecimientos de Barcelona, Valencia, Málaga, Murcia, San Sebastián y Madrid, ciudades en que todos los centros examinados merecieron un "muy mal".

Con respecto a los precios, la ciudad más cara para el piercing (incluida la colocación) es Barcelona y después Pamplona, con casi 45 euros. Las más baratas son Málaga, 22 euros de media, y Madrid, con 17 euros. Es precisamente en Madrid donde mayor diferencia de precios se registra entre los establecimientos comparados, hasta 34 euros. Otras ciudades con diferencias importantes de precio son Almería, Oviedo, Alicante y Bilbao, según Consumer.

MANOLO S. URBANO

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