Los kebabs de Reino Unido contienen niveles "preocupantes" de sal y grasas, según un estudio

Muchos de los amantes de los döner kebabs -en turco- o shawarmas -en árabe- seguramente piensan que son una forma saludable de consumir comida rápida. Según un estudio reciente elaborado en Reino Unido, sin embargo, los döner kebabs contienen un nivel "preocupante" de sal y grasas. Es lo que ha concluido una investigación llevada a cabo por empleados de 76 municipios de todo el país que han analizado 494 kebabs, según la cadena pública BBC.

El döner kebab promedio contenía casi 1.000 calorías -la mitad de la cantidad diaria recomendada para una mujer-. Geoffrey Theobald, uno de los encargados del estudio, ha declarado que "el nivel de grasas saturadas y sal en algunos de los kebabs es una causa grave de preocupación". Aún más: los kebabs contenían un 98% de la cantidad de sal diaria recomendada para un adulto y un 148% de las grasas saturadas permitidas.

Algunos kebabs contenían 1.990 calorías sin incluir la ensalada y las salsas que normalmente se acompañan, es decir, casi todas las calorías recomendadas diariamente para una mujer y más del 300% de las grasa saturadas permitidas. "Esperamos que los productores asuman el reto y trabajen con las municipalidades para proporcionar un producto más sano", ha declarado Theobald.

Según Emma Ruiz, de la Federación Española de Nutrición (FEN), en España no se ha realizado ningún estudio similar. Ruiz no se sorprende con los datos de la investigación británica: "Un producto hecho a base de carne -casi siempre cordero, que tiene mucha grasa-, con salsas ricas en aceite, que se come con queso, lechuga y tomate, es normal que tenga estos niveles de grasas y sal". Pero tampoco le parece alarmante: "No hay alimentos ni buenos ni malos, es toda la dieta la que marca nuestro estado de salud".

"Mejor que una hamburguesa"

Según Miguel Furones, responsable de una empresa de distribución de todos los productos para la venta de kebabs, esta modalidad de comida rápida es "mejor que una hamburguesa". La mayoría de la carne que se consume en España es de ternera o pollo, no de cordero. El 90% proviene de Alemania, donde la comunidad turco-alemana lleva muchos años comercializando este producto.