Un ciclista halla un cadáver degollado en una cuneta cerca de Loeches
El cuerpo ha sido traslado al Instituto Forense para que se le realice la autopsia
La Guardia Civil investiga el fallecimiento de un hombre de 40 años y de rasgos sudamericanos cuyo cadáver ha sido encontrado este sábado a las 9:30 horas por un ciclista a dos kilómetros del casco urbano de Loeches (6.210 habitantes, Madrid), según confirmaron fuentes del Instituto Armado que se ha hecho cargo de la investigación. Las condiciones en las que se encontró el cuerpo del hombre, totalmente ensangrenado al haber sido degollado, hacen que los agentes del Instituto armado consideren que casi con toda seguridad se trate de una muerte violenta, y no de un suicidio. Entre las posibilidades que baraja la investigación se encuentra el ajuste de cuentas.
Precisamente, el hecho de que el cadáver apareciera cubierto por gran cantidad de sangre fue lo que determinó que el ciclista que vio el cuerpo se decidiera a llamar al 091 y no al Servicio de emergencias del 112. No obstante, un facultativo de la Comunidad pudo comprobar in situ que el hombre había fallecido, pese a que no manipuló el cuerpo con la intención de no alterar la existencia de pruebas, como por ejemplo huellas u otros restos de los posibles agresores, según explicaron las propias fuentes del 112. Entre las pertenencias de la ropa del cadáver encontrado a dos kilómetros del centro del municipio de Loeches (a 30 kilómetros del centro de Madrid) no se encontró documentación alguna, por lo que no ha podido ser indentificado. Tras decretar el juez el levantamiento del cadáver, éste ha sido trasladado al Instituto Anatómico Forense de Madrid, para que se le realice la autopsia. Según fuentes de la investigación, tratarán de conocer su identidad con las huellas o posibles tatuajes, lo que será fundamental para el trabajo de los agentes de la Guardia Civil, que no cuentan con ningún otro indicio que haya trascendido.
De confirmarse que se trata de un homicidio, sería la primera muerte violenta de 2011, después de que la región madrileña registrara en 2010 el menor número de homicidios de los últimos 10 años, con 42 fallecidos frente a los 55 de 2009.
