Cataluña pide compensación por acoger universitarios de otras comunidades

Cuando el sistema sanitario de un habitante, por ejemplo, de Extremadura, acude a un hospital madrileño porque ofrece un tratamiento del que su comunidad no dispone, la sanidad de Madrid le atiende, pero después recibirá de vuelta esos fondos, al menos en teoría, gracias al llamado Fondo de Cohesión Sanitaria que se encarga del gasto ocasionado por su ciudadano. La Generalitat catalana quiere ahora poner encima de la mesa del futuro ministro responsable de las universidades un sistema parecido. “Deberíamos plantear que si hay estudiantes de fuera de Cataluña en Cataluña [hay 12.000], las administraciones de las que son originarios deberían compensarnos. Exactamente igual que nosotros deberíamos compensarlas si estudiantes nuestros van a otras comunidades autónomas [lo hacen 3.500]”, ha explicado Antoni Castellà, secretario de Universidades de la Generalitat de Cataluña, en una entrevista publicada hoy en El Mundo.

Castellà también reclama que las comunidades puedan decidir el precio de las matrículas

Cuando un estudiante acude a una universidad, con la matricula y las tasas que abona solo paga cerca del 20% del coste real. El 80% restante lo abonan las comunidades en las que está la universidad. Según la tesis que defiende Castellà, ese 80% debería ser responsabilidad de la comunidad de donde es el estudiante, no de donde es el centro. Además, Castellà también aboga porque el nuevo Gobierno le permita a cada comunidad imponer las tasas que considere oportunas, y no como hasta ahora, donde es el Estado quien fija un techo de subida máxima cada año. “No tiene sentido que la Generalitat financie el sistema y sea Madrid quien establezca cuál es la política de precios”, justifica el secretario catalán. Los centros catalanes se encuentran actualmente elaborando los presupuestos para el nuevo curso y el Gobierno de esta comunidad ya ha adelantado que, ante las dificultades presupuestarias que viven, exigirá subir las tasas lo máximo que le permita el nuevo Gobierno de Rajoy.

Las ideas de la Generalitat catalana en materia de universidades no han gustado a otras comunidades. Lucía Figar, consejera de educación en Madrid, se ha mostrado contraria a la medida. “En ningún caso Madrid va a cobrar tasas diferenciadas según la provincia de origen de los alumnos”, ha señalado. “Queremos seguir siendo un espacio universitario abierto”, ha señalado. Lo que sí ha apuntado, según recoge la Agencia EFE, es la necesidad de estudiar variación en la matrícula por nivel de renta o mérito académico.