_
_
_
_
_

La lucha de poder en Vocento amenaza la unidad del grupo

Varios consejeros del grupo reclaman un cambio en la gestión

Rosario G. Gómez
Del Alcázar, presidente de Vocento.
Del Alcázar, presidente de Vocento.EFE

La fusión que en 2001 iniciaron Prensa Española (Abc) y el grupo Correo, dueño de una docena de rotativos regionales, cumplía el sueño de Santiago Ybarra, presidente del nuevo conglomerado: tener un pie en Madrid. Sin embargo, el consorcio mediático se ve ahora abocado a una guerra interna por el poder. El enfrentamiento entre los principales accionistas puede provocar incluso el desmembramiento de un grupo que engloba también la cadena Abc Radio, el operador de televisión Net TV y productoras audiovisuales, según fuentes próximas a Vocento.

Otra de las opciones apuntadas consiste en la presentación de una OPA de exclusión, de manera que Vocento podría dejar de cotizar en Bolsa. Pero fuentes próximas al Consejo de Administración aseguran que las fuerzas están muy equilibradas y dudan de que nadie lance una OPA si no está seguro de quién va a tener las mayorías.

“La fusión ha sido un fracaso”, aseguran fuentes del grupo

La maniobra de un grupo de accionistas para forzar la convocatoria de una junta extraordinaria en la que pretenden sustituir al Consejo de Administración y nombrar uno nuevo podría acabar en una ruptura del conglomerado. “La fusión ha sido un fracaso”, explican las mismas fuentes, que critican decisiones como los continuos cambios en el equipo gestor de la compañía, lo que denota, “una falta de liderazgo”.

El conflicto estalló en el Consejo de Administración del pasado lunes, cuando varios accionistas que controlan el 20,6% del capital (encabezados por las familias Bergareche y Urrutia) anunciaron en el turno de ruegos y preguntas que iban a llegar un requerimiento notarial solicitando la convocatoria de una junta extraordinaria, que se celebrará en el plazo máximo de dos meses. Su propósito es el cese de los actuales miembros del Consejo, la reducción del número de ellos (actualmente, 16) y el nombramiento de nuevos consejeros.

Los Bergareche y los Urrutia abogan por incrementar el número de independientes que tomen el control profesional de la compañía. Al otro lado se sitúan los Ybarra y los Luca de Tena, artífices de los constantes cambios en la cúpula de Vocento.

La gota que ha colmado
el vaso han sido los
malos resultados de 2011

Las discrepancias se han ido acumulando durante los últimos cuatro años y la gota que ha colmado el vaso han sido los malos resultados de 2011. Vocento ha concluido con unas pérdidas de 53,5 millones de euros, frente los 9,7 millones negativos del año anterior.

El informe anual de gobierno corporativo de la compañía registrado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores recoge una indemnización al exconsejero delegado de Vocento, José María Vargas, de 3,1 millones de euros.

Las pérdidas y la negativa evolución bursátil hacían necesaria esta actuación, según la opinión de los accionistas disidentes. Su pretensión es reducir el tamaño del consejo y aumentar el peso de los consejeros independientes, pero dando cabida a los principales accionistas, entre ellos las familias Luca de Tena, Ybarra, Bergareche y Urrutia. Los promotores de la junta creían que no bastaba con la sustitución del actual presidente, Diego del Alcázar.

El actual consejero delegado, Luis Enríquez, ha asegurado que la petición por parte de un grupo de accionistas de una junta extraordinaria para sustituir al Consejo “no tiene nada que ver” con los resultados de 2011, y ha garantizado que el plan de negocio de la compañía para los próximos tres años “no está en cuestión”.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_