El PSOE propone límites a la venta de las televisiones autonómicas

Los socialistas quieren poner limitaciones al proyecto de ley del Gobierno que permite la privatización de las televisiones públicas autonómicas, un texto que ayer dio el primer paso en el Congreso de los Diputados al ser rechazadas todas las enmiendas a la totalidad presentadas. Las enmiendas presentadas por el PSOE van dirigidas a evitar la concentración de estos canales en las mismas manos. Por eso proponen que las empresas o las personas físicas o jurídicas no puedan tener una "participación significativa o derechos de voto" en más de tres canales autonómicos públicos. Y tampoco podrán hacerlo si la población de las comunidades autónomas en las que estén presentes esos operadores supera los 12 millones de habitantes.

Con esta medida se pretende evitar una concentración mediática y, de paso, propiciar la competencia en el mercado audiovisual.

Otra de las enmiendas propone que los ente públicos o las corporaciones que gestionen las televisiones no puedan ceder a terceros la producción y edición de los informativos  y de aquellos programas que así lo determine el mandato marco.

Para garantizar que una comunidad pueda, en cualquier momento, poner en marcha un canal público se plantea la obligación de que "al menos un canal"  autonómico será de titularidad pública. Eso significa que si una comunidad tiene un canal múltiple adjudicado por el Ministerio de Industria sólo podría privatizar tres.

En la veintena de enmiendas presentadas por los socialistas se prevé la posibilidad de que los canales regionales puedan confederarse entre sí y entre ellos y RTVE para la producción de contenidos, la compra de derechos de emisión, la contratación de servicios y redes y como una fórmula de abaratar los costes de difusión de la señal.

Por su lado, ERC propone en sus enmiendas dar más presencia a las obras de lenguas oficiales distintas al castellano en las cadenas de televisión. Esta formación quiere que se obligue a  los canales privados o públicos que emitan en comunidades autónomas con lengua o lenguas oficiales propias distintas del castellano garanticen que, "al menos el 50% del tiempo de emisión anual se emita en la lengua propia.

CiU defiende la competencia exclusiva de la Generalitat catalana, para decidir la manera en la que se gestiona la televisión autonómica y el control presupuestario.  El PNV aboga por la defensa de la diversidad cultural y lingüística en los medios audiovisuales  autonómicos.