El proceso por las prótesis mamarias defectuosas se celebrará en abril en Marsella

La fiscalía de Marsella ha informado este jueves a las partes de que el juicio por el caso de las prótesis mamarias defectuosas de la marca PIP se celebrará entre el 17 de abril y el 14 de mayo de 2013. El juicio se celebrará en circunstancias especiales porque en un mes el tribunal deberá analizar las 4.500 denuncias por estafa agravada depositadas por otras tantas afectadas. El escenario del juicio, en el que están acusadas media docena de personas, entre ellas el fundador y presidente de PIP (Poly Implant Prothèse), Jean-Claude Mas, de 73 años y actualmente en prisión, será un centro de congresos en el que hay una gigantesca sala en la que caben entre 4.000 y 10.000 personas.

 Philippe Courtois, abogado de 2.314 de las denunciantes, ha comentado a la agencia Reuters que “será un proceso fuera de lo normal tanto por el número de víctimas como porque vendrán desde todas partes. Hay denunciantes en todas las ciudades de Francia, y por el momento 300 mujeres han dicho que quieren asistir a las sesiones. Ahora que se conocen las fechas, el número aumentará sin duda”, añadió.

 Los acusados, además de Mas, son varios empleados de la empresa responsables de la producción de las prótesis defectuosas, que deben responder de las acusaciones de estafa y de obstaculizar la tarea de los inspectores sanitarias. Los acusados admiten haber usado un gel no conforme para fabricar esas prótesis, aunque niegan que tuviera un riesgo superior a otros productos similares. Entre los denunciantes está también la Caja Nacional del Seguro Médico (CNAM), que debe reembolsar los gastos causados por las operaciones de retirada de las prótesis.

 Los procesados pueden ser condenados a una pena máxima de cinco años de cárcel y a elevadas multas financieras. La fiscalía instruye además una causa por “heridas involuntarias”, mientras Jean-Claude Mas fue procesado en julio pasado por blanqueo de dinero, corrupción y fraude fiscal.

Entre 400.000 y 500.000 mujeres en todo el mundo llevan prótesis PIP, que se retiraron del mercado en 2010 tras un aviso de la agencia del medicamento francesa, alertada por decenas de casos de roturas. Se calcula que en España hay entre 8.000 y 12.000 afectadas