_
_
_
_
_

Un niño recibe un fármaco no aprobado que podría salvarle la vida

La compañía Chimerix de EE UU cede a la presión de la sociedad e incluirá a Josh Hardy, de siete años, en un estudio piloto

Carolina García
Imagen de Josh Hardy, de siete años, divulgada por la familia.
Imagen de Josh Hardy, de siete años, divulgada por la familia.

Tras varios días de debate en Estados Unidos, Chimerix, una farmacéutica de Carolina del Norte, dará finalmente un medicamento experimental a Josh Hardy, de siete años y enfermo de cáncer. El pequeño padece una infección viral, potencialmente mortal, desde que una recaída en noviembre de 2013 le obligara a someterse a un trasplante de médula ósea en enero. Según el hospital que trata al menor, el tratamiento podría salvarle la vida. Chimerix ha agregado que enviará la medicación en menos de 48 horas.

Josh será, según explica Chimerix, el primer paciente en formar parte de un estudio piloto que comenzará mañana miércoles y que estudiará el efecto del fármaco Brincidofovir. El niño formará parte de un grupo de 20 personas. La compañía ha añadido que el plan ha sido aprobado por la Agencia de Control de Alimentos y Medicamentos de EE UU (FDA, por sus siglas en inglés).

En los últimos días, la empresa había expresado su negativa de ofrecer el medicamento al niño, alegando motivos financieros, éticos y por no cumplir los criterios necesarios. Y su respuesta provocó que la familia de Josh lanzase varias campañas de apoyo en redes sociales como Facebook y Twitter, además de en varios medios estadounidenses.

"El cambio se debe a que el gran número de peticiones ha sido insoportable y no somos capaces de rechazarlas. Es esencial que cada individuo que padezca una crisis de salud pueda ser tratado con igual gravedad y valor, por lo que hemos decidido incluir a Josh en el estudio con Brincidofovir para tratar su adenovirus y otras infecciones víricas graves del ADN", ha explicado el presidente de la compañía, Kenneth Moch.

Tanto sus allegados como los médicos que atienden al menor en el St. Jude Children´s Hospital de Memphis (Tennessee) han dado gracias a todas las personas que les han apoyado en esta lucha para “salvar al niño” en Facebook: “Lo habéis hecho. Habéis salvado a Josh. Gracias a Chimerix y a todos vosotros”.

Hasta este momento, la empresa se había negado por varios motivos. El pasado lunes, Moch explicó que no podían decir que sí a Josh “porque tendrían que hacer lo propio con muchos otros” y se gastarían muchos recursos que impedirían completar el estudio necesario para conseguir la aprobación de la FDA, y “así ayudar a muchos pacientes en un futuro”. “Entendemos por lo que está pasando la familia. Pero esto no afecta a un solo niño”, explicó Moch. “Cada caso nos cuesta unos 50.000 dólares de nuestro bolsillo, porque las aseguradoras no cubren los medicamentos experimentales”, añadió.

A pesar de ello, la FDA permite que las compañías faciliten estos medicamentos a los enfermos en determinadas circunstancias. Exactamente, cuando alguien padece una enfermedad que pone en riesgo su vida y ya se han probado todos los tratamientos posibles y estos han fallado. En estos casos los pacientes pueden solicitar un medicamento experimental a la compañía que lo fabrica, siempre que la FDA lo esté estudiando. En algunos casos, las empresas dicen que sí -en 2013 ocurrió en 974 casos, según informa la CNN-, y en otras, dicen que no, como en el caso de Josh.

Tras las noticias, el hospital ha recalcado que “el medicamento no ha sido aprobado aún por la FDA y su seguridad y efectividad no ha sido establecida todavía para menores (...). Es también importante entender que la situación de Josh es crítica y compleja”. “Estamos agradecidos por los esfuerzos de Chimerix, de la FDA y de muchos otros que han conseguido este resultado. Esperamos que Josh y su familia sigan en los pensamientos de todos”, han concluido.

Josh ha sobrevivido a cuatro recaídas del cáncer de riñón del que fue diagnosticado por primera vez cuando tenía nueve meses. “Esperamos que el nuevo estudio no solo ayude a Josh sino también a otros pacientes”, han terminado desde la empresa.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Carolina García
La coordinadora y redactora de Mamas & Papas está especializada en temas de crianza, salud y psicología, y ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS. Es autora de 'Más amor y menos química' (Aguilar) y 'Sesenta y tantos' (Ediciones CEAC). Es licenciada en Psicología, Máster en Psicooncología y Máster en Periodismo de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_