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Condenado a seis años de cárcel el dueño de un bar de Granada por exceso de ruido

El dueño debe abonar una multa de 6.800 euros e indemnizar a cada miembro de una familia con otros 6.000 euros

La Audiencia Provincial de Granada ha condenado a seis años de cárcel al propietario de un bar de Atarfe por exceso de ruido durante siete años. Lo condena por un delito contra el medio ambiente y cuatro faltas de lesiones. El ruido de la terraza del establecimiento ocasionó problemas de insomnio y ansiedad a los vecinos. El condenado debe abonar, además, una multa de 6.800 euros e indemnizar a cada uno de los cuatro miembros de una familia con 6.000 euros por el perjuicio ocasionado. La sentencia aclara que no podían ni descansar adecuadamente ni realizar actividades cotidianas como ver la televisión, de hecho tuvieron que comprarse unos auriculares.

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Los hechos se remontan a 2006 cuando comenzó a funcionar una terraza de verano para la que el dueño del establecimiento no tenía licencia. En años posteriores se amplió la actividad de la terraza, que estuvo abierta hasta altas horas de la madrugada. Allí instaló el acusado al menos dos televisores y una mini cadena con altavoces que carecían de limitadores acústicos lo que provocaba una emisión de ruido superior a los límites permitidos legalmente. Un informe pericial detecto en la vivienda de la familia denunciante 53 decibelios de ruido, una cifra superior a los 48 que prevé la ley de máximo.

La tranquilidad de esta familia, formada por un matrimonio y sus dos hijas menores, se vio alterada por la colindancia con la terraza. El matrimonio presentó quejas ante el Ayuntamiento de Atarfe que acordó en abril de 2011 el cierre cautelar de la terraza que, pese a ello, continuó funcionando. En marzo de 2012 se autorizó la apertura por el consistorio.

A consecuencia de estos hechos, los perjudicados, que han necesitado ansiolíticos para domir, presentan trastorno ansioso depresivo, cefaleas ocasionales, migraña y ansiedad. La sentencia, contra la que cabe recurso, señala que las menores no podían acudir al colegio en las "debidas condiciones" de atención puesto que no habían podido descansar. La familia entera sufrió un menoscabo en su integridad física tal y como acreditó el informe de sanidad que obra en las actuaciones.

En Huelva, en concreto en Bollullos Par del Condado, un juzgado de lo Penal ha condenado a dos años de prisión también por un delito contra el medio ambiente a dos propietarias de un local. Una denuncia presentada por una vecina que padeció durante más de diez años en su vivienda los ruidos del establecimiento dio lugar a la sentencia. A la perjudicada tendrán que indemnizarla con 10.000 euros por las lesiones psíquicas sufridas y las secuelas, informa Europa Press.

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