Wert niega que el cambio de temarios sea "dañino" para los opositores

El ministro de Educación, José Ignacio Wert, ha negado esta mañana en el Congreso de los Diputados que su decisión de cambiar el temario de las oposiciones docentes de 2012 "resulte dañina", pues solo afecta a aquellas comunidades donde se celebrarán oposiciones: Andalucía, País Vasco, Canarias y Madrid. Además, continuó, los opositores llevan muy poco tiempo estudiando los contenidos nuevos, incluso si estudiaron durante las "vacaciones de Navidad", ha dicho. Educación publicó ayer una orden en el Boletín Oficial de Estado por la que se elimina el temario aprobado el pasado 15 de noviembre por el Gobierno saliente para volver a otro, en algunos casos, de los años noventa.

Wert ha recordado que el compromiso electoral del PP es reformar el sistema de oposiciones y que los temarios son una parte importantísima de ese cambio, por lo que no tenía sentido introducir unos contenidos nuevos solo para un año. Asimismo, Wert ha asegurado que tal y como estaban planteadas por el Gobierno saliente, las oposiciones no respondían "ni remotamente a las exigencias" mínimas de un examen de este tipo para "garantizar una selección de acuerdo a los criterios que el ministerio desea sacar adelante". Si él fuera opositor, ha añadido el ministro,  "estaría dando saltos de alegría" porque se ha recuperado un temario con el que llevaba trabajando años, "y no uno con el que llevaba trabajando apenas unos días, y eso suponiendo que durante las vacaciones de Navidad también hubieran estudiado".

Pero muchos opositores no parecen estar de acuerdo y tampoco las autonomías cuyos exámenes se verán afectados. "No dejan de reírse de nosotros", ha lamentado esta mañana Inmaculada Pérez, una aspirante andaluza a profesora de Física y Química que lleva desde septiembre pagando 150 euros al mes a una academia que le estaba preparando con unos temarios que ahora ha derogado el ministerio. "Pido que no jueguen con el dinero y el tiempo de la gente", ha lamentado entre lágrimas Pérez, quien se ha concentrado esta mañana en Sevilla para protestar por esta medida. Mientras se celebran varias concentraciones de protesta en las capitales andaluzas, el consejero de Educación de la comunidad, Francisco Álvarez de la Chica, ha reclamado esta mañana al ministro del ramo, José Ignacio Wert, que rectifique. Wert "está a tiempo de rectificar", ha dicho Álvarez de la Chica, que también ha insistido en que en los últimos 30 años ningún Ministerio de Educación había cambiado los temarios de las oposiciones "unilateralmente, sin consultar a las comunidades". 

Miles de opositores, unos 60.000, calculan los sindicatos, llevan meses estudiando los temarios aprobados el pasado noviembre, que ahora no les sirven, lo que les supone una pérdida de esfuerzo, dinero e ilusión. Ellos son los principales "damnificados", ha dicho Álvarez de la Chica, quien también ha acusado al ministro Wert de haber querido, con esta decisión, "dar cobertura a las comunidades gobernadas por el PP para que continúen con su política de recortes". El consejero se refiere a que, si no se contratan profesores funcionarios, habrá más docentes interinos, y estos, a diferencia de aquellos que tienen una plaza fija, sí pueden ser despedidos o no contratados.

El ministerio ya había recomendado a todas las comunidades a finales de enero que no convocaran oposiciones docentes en 2012, ya que el número de plazas que se puede ofrecer es muy pequeño debido a las restricciones presupuestarias fijadas por el Gobierno central. Así, se recomendó a las autonomías que acumularan la oferta docente para el año próximo. Sin embargo, Andalucía, País Vasco, Canarias y Madrid se reafirmaron en su intención de celebrar los exámenes. Y, por esa razón, el  cambio de temario publicado ayer en el BOE ha sido interpretado por diferentes sectores como una manera de torpedear las pocas oposiciones que se celebrarán en 2012. De hecho, Álvarez de la Chica asegura que se podría recurrir judicialmente la decisión ministerial, con grandes probabilidades de éxito, pero que Andalucía descarta hacerlo porque eso retrasaría aún más las oposiciones y dañaría aún más a los opositores. 

Un portavoz de Educación aseguró ayer que los cambios se decidieron “tras comprobar que los anteriores se habían hecho a cinco días de las elecciones” generales del 20 de noviembre. “Es preferible que pierdan mes y medio que todo”, añadieron desde el ministerio, sin aclarar por qué este cambio se ha hecho sin consultar con los opositores ni a las comunidades autónomas. Por su parte, el consejero andaluz también ha recordado hoy que los temarios publicados en noviembre, a diferencia de los que ha sacado adelante ahora el Gobierno, fueron "aprobados por todas las comunidades". 

Por su parte, José Blanco, responsable andaluz de enseñanza en el sindicato CC OO, cree que detrás de este cambio de los temarios hay "un juego político" en el que se está utilizando "a los ciudadanos". CC OO y UGT tienen la intención de convocar la próxima semana una protesta contra este cambio.

“Quieren que los aspirantes pidamos que no haya oposiciones”

M. P.

Cuando Carmen Espinar, de 31 años, se enteró ayer a través de Facebook de la concentración contra el cambio de los temarios de las oposiciones que se había convocado en Sevilla no dudo en asistir. “Es una pasada lo que ha hecho el ministerio”, se lamentaba esta mañana a las puertas de la delegación de la Consejería de Educación en la capital andaluza. “Están jugando con nuestro futuro y el de la educación”, ha añadido. Espinar lleva desde septiembre preparándose las oposiciones a profesora de Lengua y Literatura. Paga, mensualmente, 150 euros a una academia. “Llevo pagados mil y pico euros”. Y ahora no sabe qué hacer: “No sé si coger el temario nuevo o el viejo”. Esta aspirante, que ya se presentó hace dos años, asegura que en algunas asignaturas “cambia todo, desde el enfoque a los contenidos”.

Espinar cree que las Administraciones están utilizando a los opositores como “arma arrojadiza”. “Quieren que los opositores digamos que no haya oposiciones”, es, en su opinión, lo que está buscando el ministerio con el cambio de temarios.

“Estudiamos sin saber si habrá exámenes”

M. P.

“Este es un primer ataque, porque el Gobierno quiere acabar con las oposiciones”. Es lo que piensa Alejandro Sánchez, de 29 años, uno de los opositores que también se han manifestado esta mañana en Sevilla. Sánchez, que aspira a una de las 400 plazas de profesor de Geografía e Historia convocada en Andalucía, reconoce que son unas pruebas envueltas en la incertidumbre. “No sabemos si las oposiciones se impugnarán a última hora (…) Estudiamos sin saber si va a haber oposiciones”.

Sánchez ya había comprado los seis libros del temario aprobado en noviembre. “Cada libro cuesta 50 euros”, ha recordado. Este opositor también cree que lo que se está buscando, al final, es “intentar enfrentar a interinos y aspirantes”.