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Contra el desmantelamiento de la ciencia en España

El movimiento Carta por la Ciencia concentra a centenares de personas en Madrid denunciando los recortes en I+D y la fuga de cerebros

Foto: atlas | Vídeo: Atlas / ÁLVARO GARCÍA

“Todos somos conscientes de hasta qué punto la comunidad científica está perdiendo la esperanza. La están perdiendo los investigadores sénior, por el desmantelamiento de lo que ha costado décadas crear y por el impacto de los recortes en líneas de investigación que ellos han logrado hacer punteras; la están perdiendo los investigadores jóvenes abocados a la emigración o al abandono de la carrera científica. Y difícilmente la tendrán los estudiantes, ahora en secundaria, bachillerato o universidad, para quienes la investigación no formará parte de sus vidas”. Con esta declaración arrancó hoy en Madrid la movilización en defensa de la I+D, convocada por el colectivo de la Carta por la Ciencia. Centenares de personas, desde jóvenes becarios hasta profesores de investigación y catedráticos, han recorrido las calles del centro de la ciudad, desde la sede del CSIC hasta el Ministerio de Economía y Competitividad (Mineco), acompañando a los representantes de las organizaciones convocantes para hacer entrega de la carta al ministro Luis De Guindos. Al final la carta se ha quedado pegada con cinta adhesiva en la verja de la sede del ministerio, en cuyo registro general, y tras recibir el oportuno sello de entrada, tenían que haber depositado la carta abierta y las más de 42.000 firmas de adhesión (según las instrucciones recibidas del Mineco) el presidente de la Confederación de Sociedades Científicas de España (COSCE), y los representantes de la Federación de Jóvenes Investigadores/Precarios, de la plataforma Investigación Digna y de los sindicatos CC OO y UGT.

La Carta por la Ciencia, pegada en la verja del Ministerio de Economía y Competitividad, tras la manifestación en Madrid contra los recortes en I+D.
La Carta por la Ciencia, pegada en la verja del Ministerio de Economía y Competitividad, tras la manifestación en Madrid contra los recortes en I+D.Álvaro García

Lo que la ciencia española está sufriendo, “no es fuga de cerebros, es exilio obligado”, dijo José Manuel Fernández, portavoz de Precarios, en el inicio de la movilización, en el salón de actos del CSIC, abarrotado como hace muchos años que no se veía y con una multitud esperando fuera sin poder entrar. “No se pueden hacer oídos sordos al grito de la comunidad científica y seguir empeñados en retorcer las cifras para intentar convencer a la sociedad de una realidad que no existe”, añadió. La realidad es un recorte en la financiación de la ciencia superior al 30% en lo que va de legislatura y más de un 40% desde 2009.

El investigador Emilio Muñoz, expresidente del CSIC y uno de los padres del sistema de ciencia en España cerró el acto en el CSIC recalcando que “el futuro hay que encararlo con ideas y estrategias”. Los países con menos investigación son los que tienen mayor desempleo, subrayó.

“Lo que era un nubarrón en la primavera del año pasado”, recordó Emilio Criado, investigador del CSIC y representante de CC OO, acerca del origen del movimiento de la Carta por la Ciencia, “es ahora una auténtica tormenta que cae sobre el sistema de I+D+i español. Ya en la calle, la manifestación hacia el Mineco arrancó con gritos festivos, camisetas reivindicativas (“Sin ciencia no hay futuro”) y pancartas por la educación y la investigación públicas. Un manifestante llevaba una camiseta con un letrero alusivo: Houston, we have a problem (“Houston, tenemos un problema”). La Confederación de Rectores de las Universidades de España (CRUE) ha firmado la Carta por la Ciencia, pero no se adhirió a la manifestación para entregarla.

Urge un rescate

• La financiación pública de la I+D en los Presupuestos Generales del Estado ha caído un 30% desde 2012, y un 40% desde 2009. Las subvenciones que financian los proyectos de investigación del Plan Nacional, los contratos Ramón y Cajal y Juan de la Cierva, entre otros, se han reducido casi un 14% en el último año.

• Los 3.182 proyectos de investigación del Plan Nacional de I+D de la convocatoria de 2012, que suman 309 millones de euros para tres años, se aprobaron en enero de 2013, pero el Ministerio de Economía y Competitividad (Mineco) no ha transferido aún los fondos a los grupos de investigación seleccionados, que afrontan graves dificultades para arrancar el trabajo.

• La convocatoria de proyectos del Plan Estatal de I+D+i de 2013 aún no ha salido, seis meses después del plazo habitual del sistema de ciencia. Dado que el proceso de selección, incluida la evaluación de cada propuesta, se alarga más de nueve meses, la convocatoria de 2013 no podrá ser resuelta este año a tiempo para que los investigadores cuyos proyectos resulten aprobados puedan empezar a trabajar con la financiación asignada en enero de 2014.

• La Estrategia Española de I+D+i, aprobada el pasado febrero por el Gobierno, aplaza a 2020 el objetivo de que España invierta en estas materias un 2% de su PIB. Ese objetivo se marcaba en el plan anterior para 2011. El esfuerzo español en investigación y desarrollo se sitúa ahora ligeramente por debajo del 1,3%, tras haber caído unas décimas en el último año. La media europea está en el 2% y el objetivo de la UE es llegar al 3%.

• Las plazas de investigadores y tecnólogos en el sistema español de I+D están sujetas a la norma general del Gobierno (salvo excepciones) de reponer uno de cada 10 puestos que van quedando vacantes. En instituciones como el CSIC, que ha cancelado todos sus programas de contratación, no se alcanza ese 10% de reposición.

• El número de contratos Ramón y Cajal, para científicos de alto nivel se ha reducido a 175 en la última convocatoria frente a los más de 800 de hace pocos años.

• El CSIC necesita un rescate urgente de 100 millones de euros este mismo año, que el Mineco no transfiere.

Sergio López llevaba un pequeño cartel reivindicativo: “¿Recortas por ignorante o por incompetente?”. A sus 25 años, está haciendo la tesis doctoral en el departamento de bioquímica de la Facultad de Veterinaria sin beca y sin contrato, trabajando gratis. “¡Voy a intentar irme a Europa, si puedo, y si no, buscaré trabajo en McDonald's o donde caiga, aquí no tenemos futuro gracias a nuestros queridos políticos!”, comentó, mientras marchaba camino del ministerio. A pocos metros de él iba José Vicente García Ramos, exvicepresidente del CSIC y profesor de investigación en física molecular. “Estos no son los primeros recortes, pero es que ahora, encima, el ministerio no sabe/no contesta, y si contesta el para decir una trola. No se puede dejar a la gente como se la está dejando”, se quejaba.

José López Carrascosa, profesor de investigación en el Centro Nacional de Biotecnología, explicó por qué estaba en la manifestación: “Estamos intentando salvar parte de lo que se ha logrado con tanto trabajo, con un coste brutal económico y profesional, y no se puede consentir su destrucción así, en dos o tres años. La ciencia no es como construir un kilómetro de carretera, que puedes interrumpir en época de dificultades y que luego retomas, porque en ciencia si te paras te destruyes, y nos estamos destruyendo. Esto afecta a la gente que trabaja conmigo y a mis alumnos de la universidad”.

Al acto en el CSIC asistió Soraya Rodriguez, portavoz del PSOE en el Congreso y comentó que su grupo parlamentario “ha hecho una interpelación exigiendo a De Guindos que frene este expolio que suponen los recortes de I+D” porque “es preciso que el Gobierno rectifique su política de I+D”. Ha recalcado que, aun después de los primeros recortes, durante el Gobierno de Rodriguez Zapatero, en 2011 a la I+D se dedicó el 2,37% del presupuesto, mientras que en 2013 ha sido el 1,45%.

Los promotores de la Carta por la ciencia han leyeron los diez puntos de reivindicación que recoge, incluyendo la puesta en marcha del Plan Estatal de I+D+i 2013-2016 (que ya sufre un retraso de seis meses); “coherencia en la política de recursos humanos para atraer y retener talento en España”; eliminación de la restricción del 10% en la tasa de reposición de empleo público en el sector de I+D+i; un objetivo de inversión que permita alcanzar el 2% del PIB en I+D en el período 2013.2016; el mantenimiento de la inversión pública en ciencia básica y la creación de la largamente reclamada Agencia Estatal de Investigación, entre otros puntos.

“Es difícil mantener la esperanza cuando los investigadores siguen sin recibir fondos de los proyectos del Plan Nacional aprobados en 2012 y es muy posible que la convocatoria de 2013 no se resuelva este año”, recordó Amaya Moro-Marín, portavoz de la Plataforma de Investigación Digna. “Es difícil mantener la esperanza cuando el Gobierno boicotea su propia política científica creando un desconcierto absoluto. Pretender que la actividad investigadora sobreviva a esta parálisis es ilusorio. Es como pedir a alguien que deje de respirar por ahora… por solidaridad”. En cuanto a la solidaridad, Moro-Martín, en nombre del colectivo de la Carta por la Ciencia, recordó que “la inversión está directamente relacionada con el crecimiento del producto interior bruto y por ello es imprescindible para lograr establecer una economía menos vulnerable basada en el conocimiento y en la innovación. Dejar de invertir en I+D no es solidario, es irresponsable”. Moro Martín, astrofísica del programa de científicos de alto nivel Ramón y Cajal se irá a trabajar a Estados Unidos, en 2014, contratada en el Instituto Científico del Telescopio Espacial.

También es investigador Ramón y Cajal Alberto López, de 37 años, y un buen ejemplo de la situación. Fue autor de una publicación importante en la revista Science, sobre virus en la Antártida, cuando aún estaba en condiciones de máxima precariedad laboral en el Centro de Biología Molecular, en Madrid. Logró un contrato Ramón y Cajal, en la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), pero se va encontrando con un obstáculo detrás de otro, cuenta. Ha logrado, tras las evaluaciones, un proyecto del Plan Nacional de I+D para investigar virus de la cavidad bucal, explica, y tenía que empezar a recibir el dinero aprobado (90.000 euros en tres años), precisamente en 2013. Pero la secretaría de Estado de I+D+i no ha pagado aún ni un euro, pese a que tenía que haber transferido la primera anualidad en enero de este año. “Mi proyecto está diseñado para hacer secuenciación genómica masiva el primer año y luego dedicar otros dos al análisis, pero para eso necesito la mayor parte de la financiación al principio, y no recibo el dinero, solo un poco que me adelanta la UAM”, explica. “¿Cómo voy a arrancar sin personal, sin medios…? Mientras tanto, mis competidores en Estados Unidos son muy activos”.

La manifestación llegó a la puerta del Mineco a última hora de la mañana, y los representantes de la Carta por la Ciencia entraron para dirigirse al registro y depositar el sobre, como se les había indicado. Pero se impidió el acceso a los periodistas para seguir el acto. En tal situación y ante la sonora protesta de los manifestantes, los representantes de la carta optaron, “por respeto a la libertad de prensa”, explicaron, no entregar el sobre en el registro. Lo pegaron con cinta adhesiva en la reja de la puerta y ahí se quedó el sobre marrón con una única nota escrita: “La carta”.

La carta… sellada y al registro

Los representantes del colectivo de la Carta por la ciencia le leyeron públicamente a los asistentes a la movilización los correos electrónicos cruzados en los últimos días con el Ministerio de Economía y Competitividad para entregar la carta.

A la solicitud un encuentro con Luis de Guindos para hacerle entrega de la Carta y las firmas, la respuesta fue: “Acusamos recibo de su petición de audiencia del pasado 6 de junio con el fin de hacernos entrega de la “Segunda Carta Abierta por la Ciencia”. Lamento informarle de que el día 14 de junio, el Ministro tiene un compromiso internacional que le impide recibirles. Igualmente, la Secretaría de Estado de I+D+i tiene programado otro acto, en este caso con presencia de la Casa Real, que también le impedirá atender su solicitud. Tan pronto recibamos la carta, se la haremos llegar al Ministro a los efectos oportunos”.

A continuación, el colectivo solicitó aclaraciones acerca de la entrega de la carta: “Gracias por la contestación. ¿Entiendo que no habrá nadie del gabinete del Sr. Ministro para recibir la Carta? En este caso, ¿se la subimos a algún despacho o debemos dejarla en el Registro General? Muchas gracias por su atención”.

En respuesta, la secretaria del Ministerio de Economía y competitividad aclara. “Rogamos entreguen la carta en el Registro General del Ministerio de Economía y Competitividad, allí le ponen un sello de entrada con fecha de hoy y nos la remiten a esta Secretaria del Ministro”.

La conclusión de los convocantes de la carta es que “Estamos huérfanos de un ministro que se preocupe de I+D, estamos en manos de gente que desprecia la ciencia”.

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